Materiales necesarios
1. Una vela
2. Incienso
3. Una fotografía tuya
4. Dos Cerillas de Cera
5. Un cerillo de madera (para encender la vela)
Ve a una habitación en la que puedas estar tranquilo y donde nadie te interrumpa. Abre las ventanas al menos durante tres minutos. Ciérralas y quema el incienso. Coloca sobre tu fotografía las dos cerillas de cera en forma de cruz. Enciende la vela y reza lo siguiente:
Nadie podrá contra mí
Mi poder es superior al tuyo
Te venceré siempre que desees hacerme mal
Porque yo estoy con el bien, con la fuerza, con la luz
Deja que la vela se consuma. Las cerillas tienen que permanecer encima de la foto durante tres días. Transcurrido este tiempo, quema las cerillas. Imagina que el fuego está consumiendo todo el mal que te hayan podido causar.
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