En un rincón de su mesilla de noche ponga un vaso lleno de agua, en
el que haya introducido tres granos de sal y tres hojas de olivo. Haga
la señal de la cruz, bendiga el vaso y olvídelo, eso servir de freno; si
alguien lanzare algún ataque psíquico contra usted, ir a parar justo
allí dentro. Después de unos veinte días, échele un vistazo, en las
hojitas habrá aparecido la cara del que
os quiere mal y marcas de golpes de cuchillo, o si le han clavado algo,
los círculos, si ha habido transmisión de pensamiento, cadenas u otros
sistemas. Ahora tírelo todo y llene otra vez el vaso, de la misma manera
dejándolo otros veinte días en el mismo lugar. Si el agua adquiere
algún color, es síntoma de un hechizo, y usted actuar como en el caso
anterior. Si no hay nada, el contenido se mantendrá intacto, a pesar del
tiempo. En ese caso, después de dos meses, tírelo todo
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