El poder purificador de la Sal

El poder purificador de la Sal

De los cinco elementos de la naturaleza, la sal está asociada al elemento tierra y es un producto de limpieza psíquica muy fuerte. La energía negativa no solo tiende a acumularse en el polvo y la suciedad, por ejemplo en los lugares de trabajo, centros comerciales y otros lugares en los que se concentran muchas personas, así como lugares donde han ocurrido sucesos dramáticos, suelen estar cubiertos de un “fango psíquico”. Si no tenemos mas remedio que permanecer en estos lugares, la mejor forma de permanecer espiritualmente limpio es agregar un poco de sal en nuestro baño o ducha diaria.

Como utilizar la sal en nuestro baño o ducha diaria

En el baño, añadir un puñado de sal marina. Incluye también unas gotas de tu aceite esencial favorito, como la lavanda para la relajación, y habrás creado un mini-spa en tu baño, para limpiarte psíquicamente y relajarte al instante.

En la ducha, coge un puñado de sal y utilízalo para frotar tu piel (por supuesto muy suavemente), mientras realizas esto visualiza como esta sal te elimina todos los «lodos» y la negatividad, finalmente quedará expulsada. Si lo deseas concéntrate a nivel de tu pecho (el centro del esternón) que es el centro del chacra, ósea tu chacra del corazón. Al mismo tiempo la sal es excelente para una buena exfoliación de tu piel. Es conveniente ponerte una buena crema hidratante después, para que evitar que tu piel se reseque.

Un pequeño ritual, reforzará esta limpieza energética

Antes de tu ducha o baño, sólo tienes que mantener la sal en tu mano por un momento y decir una oración a tu Dios, ángel o deidad que consideres oportuno y pedirle que bendiga la sal y te ayude a la eliminación de tu energía negativa.
Asegúrate de visualizar como todos los (sentimientos negativos, cansancio, enfermedades, etc…) se “van” de tu cuerpo directamente al desagüe.
Después de completar el ritual de tu baño, enciende una vela blanca y “pide” que toda la energía positiva del universo este contigo ahora en tu estado fresco, limpio y perfecto.
Te darás cuenta que no te sientes “limpio” como ocurriría normalmente con cualquier otro baño, sino que te sientes más ligero y emocionalmente renovado. Haz esto tantas veces como lo necesites.

También se puede utilizar sal para limpiar el lugar donde te encuentras. Coge una botella de aerosol vacío y llénalo con agua y un poco de sal, utilízalo para rociar con cuidado las esquinas de las habitaciones (sin que la sal toque la pared), esta disolverá la negatividad. Si lo prefieres también puedes hacer una infusión previamente de la hierba verbena y salvia y añadirla al agua con sal.

Posteriormente visualiza como se disuelve la acumulación de toda la negatividad de tu casa. Por supuesto ten cuidado de no rociar con el agua salada tus plantas y no dañar tus muebles o el parquet con agua salada. Tampoco te olvides de rociar un poco de sal a través de tu puerta principal de la casa para evitar que las fuerzas negativas entren en tu casa.