Conjuro protector:
debes hacerlo en la
primera noche de luna menguante. Quema en un plato o en un recipiente de metal
la canela en rama, los pétalos de una rosa roja seca e incienso de vainilla.
Mientras humea, coge el plato en tus manos y recorre con él la casa para ahumar
y purificar tu hogar (incluida la ropa y los muebles por dentro) con el humo
que desprende la mezcla. Mientras te trasladas de una habitación a otra di:
“Selene, reina de la noche. Selene, diosa de la mujer. Dame todo el poder que
puedas para que mis enemigos no puedan dañarme y para que los golpes de los que
no quieren que a mí me amen no me hieran. Gracias Selene”